AQSO arquitectos office. Maqueta del edificio público multifuncioanl Boilerhouse con su fachada performada. La maqueta está hecha con madera de balsa, plástico y aluminio.

El proyecto se sitúa en un barrio dublinés en proceso de regeneración urbana. Los nuevos estudios ocupan y amplían una antigua caldera obsoleta. El edificio contiene una plaza que se convierte en un paisaje urbano ascendente.

Luis Aguirre
Sergio Blanco
Juan José Cruz
James Tendayi Matsuku
Yang Shi
Dinah Zhang
Yihang Zhang

Superficie: 1760 m2
Lugar: Dublín, Irlanda
Cliente: Ballymun Regeneration Ltd

AQSO arquitectos office. La estructura de la antigua caldera se amplia con un edificio de apartamentos para cerrar una plaza pública con una rampa que asciende alrededor de la chimenea hasta la cubierta.

Ballymun es un área residencial situada al norte de Dublín. Su plan urbano de regeneración ha supuesto la introducción gradual de un nuevo modelo de ciudad con tipologías residenciales de baja densidad, parques, edificios dotacionales y otras infraestructuras que han mejorado su relación respecto al tejido urbano de Dublín.

AQSO arquitectos office. Diseño conceptual de los estudios para artistas. Cada estudio cuenta con un espacio de doble altura que sirve como taller de pintura. La fachada tiene ventanas de diferentes tamaños.

Los estudios Boilerhouse pretenden dotar al barrio de un nuevo centro cultural que aporte también un carácter de identidad propia. De esta manera, el proyecto –considerado casi como una intervención “quirúrgica”-, es un esfuerzo por combinar la necesidad de un nuevo edifico con la oportunidad subyacente de mejorar la inclusión social.

AQSO arquitectos office. La sala de exposiciones del centro cultural Boilerhouse ocupa la sala de calderas del antiguo edificio. El interior es un espacio neutro acabado en blanco con pequeñas ventanas.
AQSO arquitectos office. Este diagrama conceptual es una vista axonométrica explotada donde se ven los apartamentos, la sala de exposiciones y la cubierta de la antigua caldera.

La transformación del edificio existente y su programa se entiende como una acción que va más allá de los límites del solar, por lo que la propuesta introduce también una plaza urbana. Este espacio público dispone el centro cultural a su alrededor y sitúa las zonas de exposición y los estudios de los artistas a un nivel más cercano a los ciudadanos.

AQSO arquitectos office. La planta baja de este edificio cultural rehabilitado muestra la plaza pública desde la que se accede a la sala de exposiciones. El edifico residencial es como un puente.

La plaza se expande y se adentra en el espacio circundante a través de una serie de rampas y superficies que constituyen la atmósfera de un anfiteatro. Visitantes y residentes pueden deambular o reunirse, convertirse en público de un espectáculo, contemplar la gente pasar o disfrutar de la vida urbana. Un lateral de esta superficie asciende hasta la parte que conformaba el techo de la vieja caldera, permitiendo así el acceso desde la calle a la zona de exposición al aire libre. El proyecto mantiene la chimenea del antiguo edificio a fin de conservar su valor histórico como seña de identidad en el perfil de Ballymun.

AQSO arquitectos office. Los planos de la planta de este edificio cultural muestran el aparcamiento, la cafetería, los locales comerciales, las oficinas, los apartamentos, los estudios de los artistas y la sala de exposiciones.

La posición de las distintas partes del edificio está basada en una escala gradual que va desde la zona más pública (hacia el oeste) hasta la más privada (hacia el este). Esta característica es también evidente en el tratamiento de la fachada, donde el tamaño y densidad de las aberturas varía en función de este cambio interno. De esta manera, la piel de cada uno de los volúmenes mantiene una identidad individual a la vez que permanecen integrados en un mismo lenguaje.