La extensión de la vivienda amplía la superficie útil en un diez por ciento, pero sobretodo define funcionalmente el uso público y privado del espacio entre los diferentes niveles.
La planta baja es un espacio para las actividades diurnas, un lugar de trabajo, encuentro y recreo completamente vinculado al jardín posterior. La planta superior es la zona privada para uso nocturno, donde se sitúan los dormitorios. Desde el primer piso se ve la cubierta de la ampliación, donde destacan los lucernarios con forma de diente de sierra.
Respecto al estilo arquitectónico del edificio existente, la ampliación adpota un lenguaje contemporáneo donde el grosor de los muros y forjados queda disimulado con formas angulosas y bordes decrecientes.