Posiblemente el dormitorio principal sea el mejor espacio de la villa para contemplar la vista de las montañas. Desde la planta superior se percibe la versatilidad del interior y se enmarca el exterior a través de multiples ventanas.
El corte diagonal de la cubierta inclinada adquiere un carácter escénico en el interior de la villa. El techo blanco contrasta con las paredes de madera y un lucernario permite contemplar el cielo desde la cama.
La luminosidad del espacio, reforzada por la calidez de los materiales y la vista de la vegetación exterior, hacen que el dormitorio principal sea un espacio acogedor donde disfrutar de la experiencia vacacional.