La estructura del edificio está formada por soportes y forjados de hormigón armado. A pesar del aspecto dinámico de la fachada, que se curva para formar un voldizo, la estructura sigue un sistema ortogonal convencional.
Un muro de carga de hormigón armado sirve como estructura principal del voladizo, mientras el resto de forjados se soportan por un sistema de vigas y pilares.
Para acomodar la estructura a la distribución interior del volumen, en ocasiones los pilares se transfieren hasta formar una retícula que funciona con el aparcamiento situado en el sótano.