La cuidada selecci贸n de materiales da lugar a un interesante contrapunto entre lo antiguo y lo nuevo. Los balcones modernistas contrastan con la uniformidad de los edificios decimon贸nicos de las inmediaciones, atrayendo instant谩neamente la atenci贸n del espectador.
El sutil dise帽o crea un curioso juego de luces y sombras cuando el sol incide sobre la fachada del edificio, iluminando el balc贸n revestido de piedra caliza, mientras que el metal negro mate absorbe la luz. La disposici贸n alterna de los huecos se rebela contra la homogeneidad del contexto, mientras que la arquitectura destaca por la resoluci贸n limpia de los encuentros entre materiales.
El espectador se ve atra铆do por esta forma diferente de combinar los mismos materiales y recursos de los edificios antiguos. El dise帽o minimalista de la fachada es sin embargo din谩mico, gracias al patr贸n r铆tmico que genera la secuencia alternativa de balcones que envuelven el bloque en esquina.