La propuesta realizada por AQSO para la cubrición de los restos de Santa María de Atienza en Huete, presentada bajo el lema "Un refugio para la mirada", ha recibido una mención especial en el concurso organizado por el COACM.
Una simple pieza de acero cubre los restos de la iglesia y crea un espacio desde el que contemplar el paisaje. El nuevo edificio recupera la planta original del tempo y se concibe como un espacio para conciertos. El proyecto será expuesto en el Colegio de Arquitectos de Cuenca el próximo Noviembre.