Los proyectos arquitectónicos comienzan con una idea, la materialización de un concepto en una forma y un espacio determinados. Los planos y los croquis son el medio habitual de representar y desarrollar el proyecto, sin embargo, la impresión tridimensional está alcanzando la inmediatez de las maquetas hechas a mano, permitiendo trasladar una idea en un modelo tangible.
Cuando la comprensión visual se complementa con una experiencia táctil, las ideas complejas se simplifican. Las maquetas son herramientas necesarias para comprobar y representar un diseño. Para realizar un modelo tridimensional de forma manual, se precisa tiempo y habilidad. La impresión tridimensional es una herramienta eficaz que permite maximizar iteraciones, corregir errores y avanzar en el diseño tanto las fases de anteproyecto como en la redacción del proyecto de ejecución.
Diseño conceptual
En la fase de anteproyecto generalmente se parte de un estudio de viabilidad, un análisis del emplazamiento, el estudio del marco normativo de aplicación y los requisitos espaciales y volumétricos del proyecto. Las impresiones tridimensionales permiten no sólo obtener un modelo de la topografía del terreno, sino que son de gran ayuda para materializar los estudios volumétricos de la propuesta.
Estos modelos tridimensionales nos permiten analizar las relaciones funcionales y la articulación de las partes del edificio de menor a mayor escala. Los cambios progresivos en cada una de las opciones, a través de la investigación e iteración de procesos, nos permiten encontrar un concepto que cumpla con las exigencias formales y funcionales del proyecto.
Proyecto básico
En esta etapa, la máxima prioridad es la consolidación de las ideas principales del proyecto. Es la última oportunidad para que el cliente y el arquitecto resuelvan aspectos críticos antes de desarrollar la documentación de ejecución. Las partes que no estaban resueltas en la fase conceptual, ahora toman forma y se verifican.
Las maquetas tridimensionales hacen más eficaz la comunicación entre los arquitectos y el cliente. A través de diferentes prototipos, podemos mostrar opciones de distribución y articulación de los espacios. Dado que los modelos impresos parten de un modelo tridimensional digital, las iteraciones se pueden actualizar e imprimir de nuevo fácilmente.
Proyecto de ejecución
En esta etapa del proyecto, el objetivo fundamental es desarrollar detalles, tanto constructivos como estructurales y de instalaciones. Es el momento de resolver y confirmar con el cliente los acabados a través de prototipos, que también pueden servir para coordinar con consultores y constructores la ejecución de los encuentros entre materiales.
La representación tridimensional del proyecto en esta fase es también una herramienta de marketing para el promotor, que puede mostrar a potenciales compradores e inversores un modelo fiel del proyecto que se va a ejecutar.
Existen varias técnicas de impresión 3D en el mercado. La combinación de esta tecnología con la habilidad tradicional del modelado a mano, da como resultado maquetas de varias definiciones, escalas y materiales.
Plástico
La tecnología de modelado por deposición fundida (FDM, de sus siglas en inglés) consiste en calentar y extruir sobre una base materiales termoplásticos a través de una boquilla. Otra técnica alternativa es el sintetizado selectivo por láser (SLS), que consiste en depositar una capa de polvo en una cuba que se fusiona y solidifica a través de láser en ciertos puntos.
Resina
El procesamiento digital de la luz (DLP) es una técnica mediante la cual se usan lámparas especiales para solidificar una resina fotopolímera. Aunque existen límites por el espesor y el material, este sistema permite producir modelos complejos de alta precisión.
Metal
La fusión por haz electrónico (EBM) es una técnica avanzada que permite la impresión en 3D mediante la fusión de un polvo metálico a través de un haz de electrones. El proceso se produce en una cámara al vacío controlada.
La comunicación es fundamental para el éxito de un proyecto. La impresión 3D nos ofrece múltiples posibilidades para materializar un diseño complejo en un objeto fácil de comprender.