La fachada del edificio está formada por una serie de lamas verticales de metal separadas del muro cortina por un pasillo de mantenimiento.
Esta estructural ligera permite introducir vegetación a través de jardineras suspendidas con sitema de autoriego. La vegetación y las lamas protegen al muro cortina del sol, mientras permiten que desde el interior se vea el paisaje.
La envolvente de la fachada es una solución económica, de fácil mantenimiento y reversible, que protege el edificio y facilita la limpieza de los cristales.