La dirección de obra consiste en supervisar el desarrollo de la ejecución del proyecto en cuando a aspectos técnicos, funcionales, estéticos, urbanísticos y medioambientales.
¿Qué se obtiene?
A través de la dirección de obra se consigue:
La verificación del replanteo del proyecto y control de ejecución de elementos clave como son la cimentación, estructura, albañilería, sistemas constructivos, instalaciones y acabados.
La resolución de contingencias e imprevistos en relación con el proyecto.
Se obtiene el control del libro de órdenes y asistencias, donde se suscriben las instrucciones necesarias para la interpretación del proyecto.
La elaboración de modificaciones o documentación adicional, previa aprobación o solicitud por parte del promotor.
La suscripción del acta de replanteo y el certificado final de obra.
La conformación de las certificaciones parciales y liquidación de las unidades ejecutadas.
¿Para qué sirve?
La dirección de obra garantiza que la supervisión de la ejecución del proyecto está llevada a cabo por un técnico cualificado capaz de inspeccionar, resolver y facilitar el proceso.
El director de obra actúa además como puente entre el promotor y el constructor: por un lado, posee las competencias de dar instrucciones al contratista, y por otro tiene la responsabilidad de certificar que el contratista ha realizado su trabajo para que el promotor abone las unidades ejecutadas.
Fases
Implementación
Inicia tu proyecto
Obtén un presupuesto preliminar y asistencia profesional
Error desconocido, por favor inténtalo de nuevo